Nunca vió expuestos sus cuadros y hasta se le pasó por la cabeza destruirlos, cansada de que las instituciones no le prestaran atención y de que en los círculos artísticos no se la tuviera en cuenta por su condición de mujer. Se llamaba Hilma af Klint y nació en Suecia (¡compartimos fecha de cumpleaños!) en 1862.
Fue una destacada alumna de la Academia de Arte de Estocolmo y en una primera etapa se dedicó a la pintura de retratos y paisajes de corte naturalista (le interesaba especialmente la botánica).
En la última década del siglo XIX hay un importante cambio en su obra coincidiendo con corrientes de final de siglo. Sus cuadros abordan la espiritualidad, la evolución del ser humano o las religiones del mundo. Tienen una fuerte carga cromática, están influenciados por los descubrimientos científicos de su tiempo y están dotados de un simbolismo muy personal.
Con el reciente descubrimiento de la obra de Hilma af Klint algunas de las verdades absolutas del arte europeo del siglo XX se han tambaleado. En 1911 Kandinski se autoproclamó el primer artista en descubrir la abstracción en su libro 'De lo espiritual en el arte'. Hilma llevaba años denvolviéndose en su particular universo abstracto. ¿Y si la pionera del arte abstracto fuera una mujer y no Kandinski?
Hilma af Klint era una absoluta desconocida hasta la primavera de 2013 cuando el Moderna Museet de su Estocolmo natal le dedicó su primera retrospectiva. Esa exposición viajó luego al Hamburger Bahnhof de Berlín y desde allí aterrizó en octubre pasado en el Museo Picasso de Málaga. Tres exposiciones en el mismo año para dar a conocer la obra de esta pintora que exigió como última voluntad, que no fuese mostrada en público hasta 20 años después de su muerte, porque estaba segura de que no iba a ser comprendida.
Fuímos a Málaga hace unas semanas a ver la exposición. Impresionantes los cuadros (estilo, símbolos,color, ¡¡¡dimensiones!!!)y los cuadernos de Hilma e increíble e inquietante su propia vida.
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Hilma af Klint falleció octogenaria, a consecuencia de un accidente, en 1944, el mismo año en el que murieron Kandinski, Mondrian y Munch. Sin embargo, a diferencia de la de ellos, su obra permaneció en el anonimato, y hoy en día sigue rodeada de una serie de misterios que, en gran medida, están relacionados con sus prácticas de médium.
Una mujer como ella se merecía un taller como el que le dedicaremos este sábado 8 de marzo. Los niños descubrirán sus cuadros, se acercarán al arte abstracto y nos contarán cuantas mujeres pintoras conocen. Y vosotros... ¿cuántas mujeres pintoras conocéis?.
